Los científicos aun no pudieron determinar la naturaleza exacta del objeto, pero estiman que puede tratarse de otro resto de una misión anterior.

La imagen fue captada por las cámaras frontales de prevención de riesgos del explorador Perseverance, apodado Percy, que vigilan el paisaje para protegerlo cuando conduce o utiliza su brazo robótico.

"Hemos estado discutiendo de dónde proviene, pero se cree que es un trozo de cuerda del paracaídas o del sistema de aterrizaje que baja el robot al suelo", dijo un portavoz de un laboratorio de la NASA. "Hay que tener en cuenta que no está confirmado que sea una cosa u otra", añadió.

Los restos se detectaron por primera vez el 12 de julio. Sin embargo, cuatro días más tarde, cuando el Perseverance volvió al mismo lugar, ya no estaban.

Los especialistas explicaron que probablemente el viento arrastró el objeto, como ya pasó con un trozo de manta térmica visto el mes pasado, que podría haber salido del sistema de aterrizaje propulsado por cohetes.

Por estas horas, el equipo del rover en la NASA está investigando más sobre la nueva pieza de escombros y planea publicar más detalles la semana próxima.

Basura espacial, un problema común

La acumulación de basura del Perseverance se considera un pequeño precio a pagar a cambio de los objetivos científicos del robot de buscar señales biológicas de antiguas formas de vida microbiana.

Estos objetos pueden convertirse algún día en valiosos artefactos para los futuros colonos de Marte.

"Dentro de cien años, más o menos, los marcianos recogerán con entusiasmo todo este material y lo expondrán en museos o lo convertirán en 'joyas históricas'", tuiteó el astrónomo aficionado Stuart Atkinson.

Además, esta no es la primera vez que Percy se encuentra con basura de la NASA en el planeta: ha visto restos de su equipo de aterrizaje de cerca y de lejos. En particular, en junio el róver vio un pequeño trozo de manta térmica encajado en una roca.

"Mi equipo ha detectado algo inesperado: Es un trozo de una manta térmica que creen que puede proceder de mi etapa de descenso, la mochila propulsora impulsada por un cohete que me hizo descender el día del aterrizaje en 2021", tuitearon en aquella ocasión los miembros del equipo del Perseverance después de que la foto del objeto brillante se hiciera viral.

El Perseverance sigue ocupado recogiendo una variedad de preciosos especímenes del cráter Jezero, una fascinante región del Planeta Rojo que contiene lo que se cree que es un antiguo delta fluvial, un lugar privilegiado para buscar signos de antigua vida microbiana.

Los científicos esperan que los materiales rocosos recuperados en el cráter proporcionen pistas sobre si Marte albergó alguna vez vida.