Morita, la perrita que Marcos Ginocchio adoptó en Gran Hermano siempre que se deja ver, genera ternura en los fanáticos. 

«¿Dónde está mi gorda? ¿Dónde está mi gorda?», dice Marcos y e inmediatamente Morita baja las escaleras y corre felizmente hacia el ahora modelo.

Luego Morita salta al sillón y posa junto a Marcos. En ese momento el ganador del reality gira su cámara y se le escucha decir: «Hola, hola bonita, hola bonita«.

Al final del vídeo el campeón de gran hermano hace que Morita salude a la cámara y con besos cierran el tierno momento.